Una de las primeras reacciones que solemos ver en personas que tienen dificultades para ver algo de luz en sus caminos hacia la mejora sea cual sea su objetivo es "no puedo". Les propongamos perspectivas, les hagamos preguntas para su reflexión, les ofrezcamos ejemplos o realicemos otro tipo de aproximación al problema en busca de activar alguna respuesta, emerge como un mantra protector, un mantra del miedo al cambio, del miedo a que algo pueda salir mal arrastrando su situación a un punto todavía peor es el "no puedo" o "no soy capaz". Evitar el mal peor o el "tampoco me va tan mal" refleja una inseguridad limitante muy cercana a la deriva patológica que espera a que las circunstancias lo lleven a donde quiere llegar, aunque no tenga nada claro dónde está ese lugar o si ni siquiera existe. ¿Después de esto que nos queda?. La queja, el lamento y la búsqueda de culpables. Frente a este tipo de situaciones, una recomendación es el trabajo con
Psicología, Deporte, Educación Física